Atlético Tucumán mostró notables síntomas de mejoría en su juego en el debut de Pablo Guiñazú como entrenador, pero el equipo no pudo pasar del empate ante Estudiantes de La Plata.

En la primera jugada del partido, el Deca se puso en ventaja ayudado por la fortuna. Rogel, en contra, marcó el 1 a 0.

Arriba en el marcador, el Gigante del Norte se mostró sólido en la cancha, con una defensa firme, juego asociado en el medio y un flujo de ataque constante, llevando peligro en reiteradas ocasiones al arco de Mariano Andujar, sin encontrar nunca la eficacia para una segunda puñalada.

Erró tanto el equipo, que algún que otro viejo sabio podría haberlo anticipado. Porque los goles que se erran en un arco. Así fue que, sobre el final, Leandro Díaz cruzó la pierna para marcar un empate doloroso e injusto.

Tras este cotejo, el equipo del Cholo emprende regreso y se prepara para su próximo compromiso: el lunes 25, a las 16:45, frente a Patronato en el José Fierro.